Vaya, vaya.
Última idas de olla...
Eider y yo todo el día inmersas en la Laguna de Parón...


Y viajes finales:
Nerea y jon ya se han ido rumbo Cusco y mañana comienza nuestra peregrinación a la selvática Barranquita.
Esto se acaba...


Nerea acabó en la piscina, con ropa incluida. Jon Braun indio txiki bat zen, hizo de las suyas.
Fidel con sus padres.
Comiendo y celebrando con pachamanca.
Detalle de este plato típico con papa, camote, tamal y 3 carnes distintas.
Todos juntos en busca de movilidad.

A punto de morir por primera vez...
segundos después estaba montada en un caballo camino del refugio.

Yo y mi llama que llaaaaaaaa..... en realidad era una yegua (estilo ponesco), pero me salvó la vida.

El refugio, con los sutiles metros sobre el nivel del mar apuntados con maderitas.
Al fondo el Huandoy.

Meriendacena tras llegar todos al refugio (estos 3 mendizales media hora después de mi, gracias a la yegua que me dió tanto).

Impresionante vista del Huascarán con una amplia sonrisa gracias a que seguía viva.

Los 4 yungaynos felices y contentos a 4.765 m.s.m.

Por la noche con los dos guías peruanos con los que estuvimos jugando al UNO (reminiscencias italianas).

Jon y el Huascarán.

La Laguna 69 a la vista, después de 4 horas caminando a 5.000 m.s.m. Morí por segunda vez, por lo menos la laguna es impresionante.

Felices con turquesa de fondo.

En medio de la nada.
En pleno descenso




Impresionante Llanganuco

Fuimos a pasar la mañanuka del domingo, y realmente nos encantó

Fuimos toda la tropa: Eider, Remigio, Nerea, Sara, Helena, Jaione, Alex, Jon, Sira, Abel y yo.
Aumentamos en número gracias a la visita relámpago de los Cooperantes de San Juan de Lurigancho.

Aqui una de los Yungaínos

Jon y Remigio posando

Eider meditando

Jon monesco

En la txalupilla, nos pegó una vueltecica por el lago más que relajante. Sin cabeza Jaione, Alex a su lado, detrás Helena (de Lurigacho las 3), Sara y al fondo Sira y Nerea. En lo más profundo, manejando un objeto no definido, Eider. Todas las mujeres en una única foto.

Dando más envidia